
LA TAREA ESCOLAR DE PROHIBIR EL AFECTO
“Papi, imagínate, que el coordinador de mi colegio está prohibiendo y va a castigar el contacto físico y las manifestaciones de afecto”, fue la desesperada queja que mi hija, estudiante de secundaria de un colegio femenino, me expresaba recientemente. El asunto, no sin antes pensarlo más de dos veces, me movió a opinar como padre de familia, sin mencionar el plantel ni el nombre del coordinador para no afectar la imagen institucional.