Los animalitos de caramelo constituían una de las expresiones más extendidas de los dulces en el Caribe colombiano y se vendían incluso en las calles de las más importantes ciudades de la región.
-Hace 18 años murió “Nicolás Elías”, como lo llamaba Diomedes Díaz, dejando su nombre enmarcado en los anales del folclor vallenato donde aparece como el primer Rey de Reyes del acordeón en el año 1987-.
El nombre de la variedad de cachua que presentamos hoy es Balistes capriscus a la que los pescadores wayuu llaman yotojoloyuu, quizás por el color oscuro que tiene en algunas partes de su cuerpo que se asemeja al xilema del cactus cuando está seco y se le puede emplear en la construcción de techos y paredes de las viviendas nativas.
El plato que presentamos hoy, guiso de venado en aceite de corozo, proviene de Tomarrazón una parroquia histórica cercana a Riohacha situada al pie de la Sierra Nevada que se encuentra rodeada de verdes colinas, claros arroyos y caminos de árboles frondosos por donde pasaba en sus correrías musicales la figura mítica de Francisco El Hombre.
Actualmente, Juliana Paola es participante de la metodología Grupos de Ahorro Local (GAL), promovida por la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), a través de su programa Iniciativa de Finanzas Rurales (IFR), que viene impartiéndose en La Guajira, a través de la facilitación de la Asociación Salto Ángel.
Sin más rodeos, la papora era una práctica de algunas mujeres wayuu de la Alta Guajira, con la cual trataban de atraer a su marido distante. Bien se sabe que el hombre wayuu, como Juyá, es errante, móvil y puede tener varias esposas, unas muy distantes de otras.
Quería dejar atrás para siempre el nombre de Jorge Epieyú y ser reconocida legalmente como Georgina Epieyú. Así debía constar en su documento de identidad, el cual tramitó cuando tenía 23 años, ataviada ya con prendas femeninas.
-Hace 99 años nació en La Loma, Cesar, el hombre que supo darle el mejor sentido a sus vivencias y convertirlas en canciones, que hoy son un referente en el folclor vallenato-.
La leche cojosa, o kojosü entre los wayuu, se obtiene añadiéndole cuajo a la leche fresca. También se logra al prepararla en una olla, antiguamente se empleaba un recipiente de calabazo, que se dedica exclusivamente para su conservación en la que se mezcla la leche fresca con un poco de leche cuajada del día anterior.
En la Riohacha de antaño el icaco se encontraba en algunos patios cercanos al mar y se vendía en las calles y plazas de mercado. El más antiguo de esta ciudad se encontraba a orillas del mar y era abastecido por cayucos que llegaban cargados de pescados, frutas y verduras desde distintos puntos del litoral tanto de l norte como de la Punta de los Remedios y Dibulla.