Cerrejón se une a la conmemoración mundial por los primeros diez años de la promulgación de los Principios Rectores sobre Empresas y Derechos Humanos de Naciones Unidas. La empresa reafirma su compromiso con el respeto de los derechos humanos de sus empleados y las comunidades que rodean su operación, a través de la implementación de políticas, estándares y sistemas de gestión que tienen como objetivo evitar, mitigar y compensar los impactos que se puedan presentar.
“El respeto a los derechos humanos en Cerrejón contribuye a la creación de valor social y ambiental, columna vertebral de nuestro compromiso con la sostenibilidad y el diálogo respetuoso con los trabajadores, las comunidades y la sociedad civil en general. Hoy, diez años después de la promulgación de estos principios, se han convertido en la hoja de ruta de cómo actuamos en relación con los derechos humanos. Es por eso que deseamos enfatizar su vigencia y relevancia y reafirmamos nuestra plena voluntad de continuar impulsando nuestra gestión empresarial de una manera responsable y respetuosa de los derechos de todos”, afirmó Luis Marulanda, vicepresidente de Asuntos Públicos y Comunicaciones de Cerrejón.
Contenido sugerido:
- Promedio de antigüedad de los trabajadores de Cerrejón es de más de 16 años
- Según Merco Talento 2021, Cerrejón es la mejor empresa minera para trabajar en Colombia
- En el Centro de Rehabilitación de Fauna de Cerrejón, nacieron más de 1.150 hicoteas
- Un nuevo cementerio y un tanque elevado inauguran Cerrejón y la comunidad de Patilla en La Guajira
En junio de 2011, el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas aprobó por unanimidad los lineamientos que hoy rigen la actuación de Estados y empresas en materia de debidas garantías y respeto a los derechos humanos en el contexto empresarial. Estas directrices fueron el resultado de un importante trabajo de consulta realizado entre empresas, gobiernos y sociedad civil, liderado por el entonces Representante Especial de la ONU para los Derechos Humanos y las Empresas Transnacionales y Otras Empresas Comerciales, John Ruggie.
Cuando se emitieron los Principios Rectores, Cerrejón amplió el alcance de su Política de Derechos Humanos e inició el diseño e implementación del actual proceso de debida diligencia en derechos humanos. Este proceso busca fortalecer la identificación y gestión de los riesgos e impactos ocasionados por la operación y mejorar los espacios de diálogo con las comunidades sobre los mismos, atender las quejas que puedan surgir sobre potenciales impactos y establecer mecanismos de evaluación periódica del desempeño de la empresa en materia de derechos humanos.
Como resultado de este esfuerzo, a la fecha, Cerrejón ha logrado realizar dos estudios de riesgo e impacto en los derechos humanos que contribuyeron a una mejor comprensión y gestión de dichos riesgos e impactos. Además, desde el 2010 ha venido capacitando al 100% de los nuevos empleados en temas de derechos humanos e instaló una Oficina de Reclamaciones que ha asistido a los empleados y las comunidades, llegando a acuerdos y cierres en el 82% de los casos presentados.
Así mismo, la empresa ha venido implementando un sistema de debida diligencia basado en verificaciones internas y externas de las prácticas comerciales y ha desarrollado múltiples escenarios para el dialogo respetuoso y directo, rendición de cuentas y consultas previas con la presencia de alrededor de 400 comunidades étnicas, diversas organizaciones de la sociedad civil nacionales e internacionales.