Excombatientes de las Farc están fabricando tapabocas industriales, uniformes de enfermería y otros elementos de bioseguridad para prevenir el contagio del COVID-19.
Lo hacen en la fábrica de confecciones Fariana que comenzó a operar en el 2017 en el antiguo Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación Amaury Rodríguez de la vereda Pondores, en el corregimiento de Conejo.
María Rojas es una de las costureras que hacía parte en épocas de guerra del Bloque Caribe de las Farc y quien ahora hace lo que más le gusta, coser y trabajar el lado de sus compañeros.
“Estamos aplicando aquí en la vida civil, la solidaridad y el trabajo colectivo que nos enseñaron nuestros líderes”, afirmó.
Afirma que con ella trabajan unas once personas, que hacen parte de la Cooperativa Multiactiva para la Paz de Colombia Coompazcol, una de las 80 que se han creado en el país para la reincorporación económica de los que dejaron las armas después que se firmó el Acuerdo de Paz.
Dice que son unos 20 mil tapabocas los que se producirán, cuatro mil de los cuales se donarán a las veredas y corregimientos cercanos al ETCR.