La Administración distrital de Riohacha alertó sobre la presencia de la Fragata Portuguesa, conocida científicamente como Physalia Physalis, en las playas y el mar de la ciudad, por lo que recomendó a los bañistas ingresar a estas siempre en compañía mínimo de otra persona, como también que los niños estén siempre bajo la supervisión de un adulto.
Además, se recomienda dar aviso a las autoridades de socorro, salvavidas y al resto de personas, en caso de avistamiento de la medusa, para prevenir lesiones por contacto.
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La dirección de Medio Ambiente de Riohacha advirtió que «se pudieron comprobar varios ejemplares de esta especie en las playas, sacadas por la marea. Esta fragata genera un gran peligro tanto para bañistas como para usuarios de las playas, teniendo en cuenta que los largos tentáculos que esta posee pueden causar múltiples heridas y laceraciones en brazos y el resto del cuerpo”.
Jorge Pacheco Pertúz, director de Medio Ambiente Distrital, agregó que es necesario abstenerse de tocarla aunque se encuentre muerta, debido a que su alta concentración de veneno puede causar múltiples serias lesiones.
“En caso de picadura se recomienda lavar la zona afectada con agua de mar y dirigirse al centro de salud más cercano para la atención médica especializada”, dijo Pacheco Pertúz.
Es importante recordar que la fragata portuguesa es un animal carnívoro marino, familiar de los corales y anemonas, que se caracteriza por su llamativo color purpura y fucsia; suele encontrarse en aguas oceánicas cálidas y visita el Caribe colombiano durante la época seca que se presenta anualmente desde el mes de diciembre al mes de abril, con la migración de muchas especies, arrastrada por los vientos alisios, cuyos tentáculos pueden medir 10 metros en condiciones normales, e ir incrementando.
Esta medusa posee un flotador en forma de vela que le permite boyar a la deriva a través de las corrientes o gracias al viento, secreta una neurotóxina que en contacto con las personas puede producir irritación en la piel y eventualmente podría generar colapso cardio-respiratorio, mareo, nauseas, espasmos en las extremidades, dolor de cabeza o articular, alteraciones de pulso o de la presión sanguínea, hinchazón, etc.
Corpoguajira explicó que febrero y marzo, son los meses comunes para que esta especie aparezca debido a que en esta época del año las corrientes y vientos son más fuertes, lo que favorece su desplazamiento.
