El éxodo wayuu
La historia se repite casi un siglo después. Así como la familia de nuestro Gabriel García Márquez, encabezada por el Nicolás Márquez, llevaron un racimo de esclavos wayuu a Aracataca, zona bananera, la cobriza influencia de esta etnia de nuevo vive la experiencia del desanclaje y el obligado exilio, ahora buscando oportunidades y así espantar a Jamu (el hambre) que campea libérrima por sus ranchos arrebatándole la vida a sus hijos.