Los mecenazgos en el vallenato, más allá de los marimberos
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Los mecenazgos en el vallenato, más allá de los marimberos

Hubo mecenazgo de los barones de la bonanza marimbera sobre algunos intérpretes vallenatos, en especial los más exitosos de La Guajira, Cesar y Magdalena, indudablemente. Sus parrandas y festejos fueron animados por los intérpretes de moda y de su gusto. De la prestación de un servicio pasó a la lisonja: los saludos y las canciones de exaltación. 
Vallenato en doble sentido
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Vallenato en doble sentido

Vale preguntarse, ¿Por qué se escandalizan los melómanos vallenatos por un equívoco de doble sentido y no lo hacen los paisas con su música? Hay géneros musicales que como sello de identidad tienen la frecuencia de expresiones populares de doble sentido. La parranda paisa es uno de estos, también las músicas de carnaval. De allí que, intérpretes como Dolcey Gutiérrez se llevan el galardón simbólico como “el rey de doble sentido”. Habría que recordar aquí que, algunos de los éxitos más sicalípticos de Dolcey son canciones de autores vallenatos como Manuel “El papa” Guerra y el profesor Adalberto Camargo, ambos de Chorreras y residentes en Distracción. 
La “esencia” de la música  vallenata
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La “esencia” de la música vallenata

Se ha demostrado ya que la mayoría de canciones vallenatas no son narrativas, así que esa forma expresiva tampoco es la esencia; que no todo vallenato nació en los campos y potreros, luego no depende de dónde se hace y que, si algunos creen que la poesía es su principal polo, no sé qué tiene de poesía canciones vallenatas como “La puerca”, “La perra”, “La yuca y la tajá”, “La espelucá” o “Me tiene pechichón” (más conocido como “El hombre es como el perro”).