Se comprometió a llevar todas las inquietudes al presidente de la república, Gustavo Petro, para que se aceleren las soluciones. “No soy funcionaria, pero eso no me impide ayudar a la gente, me importan y puedo empujar las cosas para que sucedan”, agregó.
A medida que le queden menos días al gobierno Duque, se le agote la reserva de mermelada y se acerque las próximas elecciones, se va a ir escalando la neo narrativa de que Duque traicionó las banderas del uribismo como lo hizo Santos.