La Secretaría de Desarrollo Social del Municipio de Maicao ha emitido una alerta social temprana ante el retiro o cese de actividades de varias organizaciones no gubernamentales (ONG) y entidades de cooperación internacional que brindaban apoyo a la población vulnerable, especialmente migrantes y retornados. Según datos de Migración Colombia, más de 54.000 personas en esta condición residen en el municipio, sin contar aquellas que han ingresado por pasos no oficiales.
Las organizaciones son:
- Consejo Noruego para Refugiados (NRC)
- Save the Children
- Cruz Roja Internacional
- ACNUR
- DRC
- Fundación Renacer
- UNFPA
- UNICEF
- World Vision International (WVI)
- OIM
- FUPAD
- OPS
- WFP
Estas organizaciones desempeñaban un papel clave en la provisión de asistencia en salud, educación, protección infantil, seguridad alimentaria, integración y transferencias monetarias. Su retiro impacta negativamente el acceso a servicios básicos, aumentando los riesgos sociales y económicos para miles de personas.
Preocupación por posibles consecuencias
La administración municipal ha instado a las autoridades locales, departamentales y nacionales a tomar medidas inmediatas para evitar que la situación desemboque en una crisis humanitaria. Uno de los sectores más afectados es el asentamiento «La Pista», donde viven unas 10.000 personas, de las cuales el 40% pertenece a la etnia wayuu. La atención brindada por las ONG ha permitido mejorar sus condiciones, pero su salida podría agravar la pobreza extrema, la desnutrición infantil, la explotación laboral y el desplazamiento forzado.
El alcalde Miguel Felipe Aragón ha manifestado su preocupación por el impacto de las políticas internacionales en la reducción de recursos para la atención de la población vulnerable. Hasta el momento, no se han definido estrategias claras para mitigar las consecuencias de la salida de estas organizaciones, lo que podría aumentar la violencia, la explotación infantil y la pobreza en la región.
Afectaciones identificadas
Entre las principales problemáticas que podrían intensificarse con la salida de estas entidades se encuentran:
- Desprotección de la niñez: Incremento en la deserción escolar, explotación infantil y reclutamiento por grupos al margen de la ley.
- Deficiencias en seguridad alimentaria: Familias que dependían del apoyo nutricional pueden enfrentar mayores dificultades.
- Problemas en salud: Disminución en el acceso a tratamientos y prevención de enfermedades.
- Aumento de violencia de género y trata de personas: La falta de programas de protección pone en riesgo a muchas mujeres y niños.
- Falta de integración para migrantes: La comunidad venezolana podría verse en mayor situación de exclusión.
Ante este panorama, la administración municipal hace un llamado al Gobierno Nacional y a las entidades competentes para que implementen estrategias que permitan suplir los servicios que brindaban estas ONG y evitar un deterioro en la calidad de vida de la población afectada.
*Créditos fotografía (Colprensa – Camila Díaz).