El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo – PNUD en Colombia, realizó una donación de 2.800 protectores faciales al departamento de La Guajira, como parte de la estrategia ‘Cascos de Vida y Salud’.
Los ‘Cascos de Vida y Salud’ son dispositivos de protección faciales desarrollados por comunidades de innovadores y desarrolladores, quienes concursaron en dos etapas de esta estrategia con prototipos que fueron evaluados por expertos, y premiados por su calidad y efectividad para su producción masiva.
Según el PNUD el uso de estas caretas garantiza comodidad, seguridad y refuerza una de las principales medidas de autoprotección ante la pandemia: el uso de tapabocas. El dispositivo de protección facial no sólo actúa de barrera ante el virus en el aire o el ambiente, sino que previene el contacto de salpicaduras de fluidos nasales y bucales con el rostro, siendo dicho contacto el principal riesgo de contagio.
Jessica Faieta, representante Residente del PNUD en Colombia en diálogo con el gobernador de La Guajira, Nemesio Roys, explicó que “‘Cascos de Vida y Salud’ es una estrategia con un trasfondo esencial: cuidar la salud de todos y todas, con soluciones innovadoras, para lograr volver a la nueva normalidad de manera segura”.
Explicó que los 2.800 dispositivos de protección facial son resultado de las donaciones hechas por compradores de estas caretas, quienes por la adquisición de cada ‘Casco de Vida’ donaban uno adicional para las comunidades más vulnerables.
“Con los años de acompañamiento a La Guajira, y ahora con nuestra apuesta por la ‘Yanama por el Desarrollo Humano Sostenible y Buen Vivir en La Guajira’, hemos comprendido sus desafíos complejos, que reclaman atenciones decididas, participativas, y que sumen la mayor cantidad de esfuerzos para superar las brechas y limitaciones al desarrollo sostenible. Y vemos que el departamento se puede quedar atrás si la pandemia estanca los esfuerzos de recuperación económica, reactivación social y nueva normalidad. Estos dispositivos pueden contribuir a una más segura, incluyente y tranquila reactivación del departamento ante la nueva normalidad”, añadió Jessica Faieta.
El gobernador de La Guajira, Nemesio Roys, expuso a su turno una estrategia para la distribución de los 2.800 dispositivos, priorizados para beneficiar a población altamente expuesta y vulnerable por la pandemia, como comerciantes, poblaciones indígenas y migrantes.
“Estos 2800 Cascos de Vida y Salud llegan en el momento más oportuno: justo cuando dejamos atrás el aislamiento extensivo, para pasar a uno en nueva normalidad que significa retos muy grandes para territorio: proteger la vida de nuestras comunidades. Destinaremos 800 de estos dispositivos de protección facial a la Yanama y 2000 los enrutaremos hacia el comercio informal, que muchas veces es atendido por población indígena: buscaremos que estos Cascos de Vida lleguen a zonas donde más comunidades puedan aumentar su protección”, explicó a su turno el gobernador de La Guajira, Nemesio Roys.
En este sentido, también destinará algunas caretas faciales para comunidades Wayuu, como parte del proyecto ‘Yanama por el Desarrollo Humano Sostenible y el Buen Vivir en La Guajira’, un esfuerzo en el que participan la Gobernación y el PNUD.
